viernes, 2 de septiembre de 2016

CAFÉ SOCIETY: EL PEQUEÑO WOODY EN EL PAÍS DE LOS SUEÑOS

Café Society. Director: Woody Allen. Protagonistas: Jesse Eisenberg, Kristen Stewart, Steve Carell, Blake Lively, Jeannie Berlin, Parker Posey, Corey Stoll y Ken Stott, entre otros. Narrador: Woody Allen. Guionista: Woody Allen. FilmNation Entertainment / Gravier Productions / Perdido Productions. EE.UU., 2016. Estreno en la Argentina: 1º de septiembre de 2016. 

En su seminal historieta Little Nemo in Slumberland (1905-1911), el norteamericano Winsor McCay elaboró una compleja arquitectura psicosocial alrededor de la relación existente entre el mundo real y el país de los sueños. Considerada como el primer gran clásico del cómic mundial, la plancha dominical nos sacaba de paseo por el inconsciente del pequeño Nemo hasta que, invariablemente, en el último cuadrito, el niño se despertaba al caerse de la cama. 


Café Society, la más nueva película del incansable Woody Allen, opera sobre este mismo precepto, el choque entre la realidad y el sueño, entendiendo al sueño como algo mucho más amplio y complejo que la función biológica realizada por el cerebro mientras el cuerpo cumple con el acto fisiológico de dormir. Aquí, el sueño está mucho más relacionado con los procesos de proyección aspiracional a futuro que todos hacemos de nuestras propias vidas. O sea, la pendular tensión entre la gratificación y la frustración que nos genera el deseo. 


Los escenarios naturales para estos opuestos que se atraen y repelen, vienen establecidos entre Nueva York y Los Ángeles, en los soñados años ’30 en que el cine clásico de los grandes estudios iba diseñando las formas, los colores, las medidas con que el Sueño Americano iba a formatear el concepto de amor, poder, trabajo y felicidad para varias generaciones por venir. Del armado de Allen, por supuesto, surge la belleza, la profunda ligereza, el humor ácido con que los elementos (los personajes) harán de las eternas obsesiones del artista una obra nueva, redonda, atractiva, agridulce y ejemplar.


Historia de amores cruzados, de elecciones irrevocables (¿quién, en su sano juicio, se atrevería a juzgarlas de acertadas o equivocadas?) y de añoranzas basadas en las expectativas generadas por aquello que fue sin llegar a ser del todo, regada con abundante jazz del bueno, con ostentaciones huecas, con negociados mafiosos cerrados de ambos lados del mostrador, esta tragicomedia shakescervantina nos deja tal como McCay dejaba a Nemo al final de cada historieta. En el suelo, enredados entre las sábanas y con los ojos abiertos ante la única verdad: Somos (y seremos) el resultado de las decisiones que hemos tomado en nuestro camino. 
Fernando Ariel García 

Links: 

No hay comentarios:

Publicar un comentario